CONCEPTOS
Una uveítis es una inflamación de la úvea, capa intermedia del ojo. Las uveitis pueden ser anteriores (iris), intermedias (cuerpo ciliar) y posteriores (coroides, vítreo). También es posible una panuveitis (toda la úvea).
En la Artritis Idiomática Juvenil (AIJ) es mucho más frecuente la afectación de la úvea anterior (uveitis anterior o iridociclitis)
Una artritis es la inflamación de las articulaciones. La AIJ es una entidad que afecta a menores de 16 años, afectando a las articulaciones y acompañada de otras manifestaciones extraarticulares.
Según el número de articulaciones diferenciamos distintos tipos (oligoarticullar o pauciarticular, poliarticular y la forma sistémica). Recientes clasificaciones también incluyen en esta entidad la artritis Psoriásica y la Artritis-Entensitis.
Pues bien, la AIJ es la causa más común de uveitis anterior en la infancia. La uveitis o iridociclitis es una de las manifestaciones extraarticulares más frecuentes, importantes y de mayor morbilidad de la artritis idiopática juvenil (AIJ).
La uveitis es con mucho más frecuente en la forma oligoarticular de la AIJ, en el sexo femenino, con titulos de ANA (anticuerpos antinucleares), así como con HLA-DR5 (antigenos de histocompatibilidad) positivos y con desarrollo precoz de la artritis. También puede aparecer en la forma poliarticular, y es excepcional en la forma sistémica.
CLÍNICA DE LA UVEITIS
En su gran mayoría resultan asintomáticas, es decir sin síntomas. Como síntomas posibles señalamos la alta sensibilidad a la luz (fotofobia), ojo rojo y dolor ocular. Debido a la presencia de células inflamatorias en el segmento anterior del ojo, la visión puede ser borrosa, aunque resulta difícil que un niño nos describa un síntoma como éste.
Signos que pueden orientar a la presencia de una uveitis en un niño con AIJ son la presencia de ojo rojo o anomalías de la forma de la pupila (debido a que la inflamación produce sinequias del iris al cristalino).
Sinequias del iris que deforman claramente la pupila |
EXPLORACIÓN OFTALMOLÓGICA
Todos los niños afectos de AIJ son revisados de forma sistemática por un médico oftalmólogo, según el tipo de AIJ son revisados con mayor o menor periodicidad, así como según el grado de inflamación.
En la forma Oligoarticular serán revisados cada 3 meses aproximadamente; en la Poliarticular cada 6 meses, mientras que en la forma sistémica la revisión será anual. Los protocolos de actuación varían según el hospital, trabajando en conjunto los equipos de Reumatología y Oftalmología infantil.
Según la edad del niño y el grado de colaboración la exploración variará un poco. Siempre intentaremos examinar el ojo en la lámpara de hendidura, buscando signos de inflamación, como células en la cámara anterior (llamado tyndall), depósitos o precipitados en el endotelio o capa más profunda de la córnea, sinequias posteriores (deforman la forma de la pupila), presencia de pigmento liberado por el iris en la cara anterior o cristaloides anterior e hiperemia de la conjuntiva. Los precipitados queráticos a veces tardan más tiempo en desaparecer. Intentaremos igualmente tomar la tensión del ojo, aunque muchas veces será preciso hacerlo digitalmente.
En caso de uveitis aguda se instaurará tratamiento tópico con colirios dilatadores de la pupila y con corticoides. Es importante romper las sinequias con la dilatación pupilar, ya que puede dejar secuelas en la forma pupilar de forma permanente. El niño será revisado con frecuencia hasta que la inflamación ceda. Su médico hematólogo puede que realice cambios en la terapia sistémica, también dependiendo del número de brotes de uveitis y de la severidad de los mismos. La terapia sistémica incluye antiinflamatorios no esteroideos, como el Naproxeno; corticoides orales e inmunosupresores como el Metotrexato o Etarnecept (anti-TNF), entre otros.
Precipitados queráticos en uveitis anterior activa | |
La inflamación puede ser tal que cierre por completo la pupila produciendo un abombamiento del iris |
La inflamación puede ser tal que cierre por completo la pupila produciendo un abombamiento del iris
COMPLICACIONES DE LA UVEITIS
Podemos encontrar sinequias posteriores, glaucoma, catarata, queratopatía en banda (calcio en córnea), edema macular quístico e hipotonía del globo ocular. En ocasiones es necesaria la cirugía para tratarlas, como la cirugía de la catarata y del glaucoma.
Queratopatía en banda en la imagen de la iquierda y catarata en la de la derecha. |
TRATAMIENTO DE LAS UVEITIS Y PRONÓSTICO
El tratamiento suele ser tópico, salvo en casos muy severos o con brotes muy frecuentes, en los que se precisará además tratamiento sistémico, con corticoides orales, incluso con inmunosupresores como la ciclosporina, el metotrexate, infliximab, etarnecept u otros agentes que van introduciéndose en el arsenal terapéutico. La decisión será tomada en conjunto con su médico reumatólogo y oftalmólogo según cada caso particular. También puede llegar a ser necesaria cirugía de las posibles complicaciones, siendo igualmente informado oportunamente por su oftalmólogo.
El pronóstico depende fundamentalmente de la agresividad de las uveitis, si bien en un alto porcentaje de casos las agudezas visuales resultantes suelen ser buenas y las complicaciones por lo general escasas
Dra.Emma Ausín González
Dra.María Jesús Gómez Maestra