¿QUÉ ES UNA CATARATA?

Se llama catarata a cualquier opacificación del cristalino. El cristalino es una lente transparente con forma de altramuz que se encuentra dentro del ojo, formando parte del sistema óptico del mismo. El centro se llama núcleo, el cual está envuelto por una cápsula que equivale a la piel del altramuz.

El cristalino es una de los dos cristales con los que ve el ojo humano, junto con la córnea. Por eso, cuando se hace más oscura una parte de él aparecen problemas de visión. Éstos no se puede corregir con unas gafas, sino que el único tratamiento efectivo es la cirugía de la catarata.

¿CUÁLES SON LAS CAUSAS?

La mayoría de las cataratas están asociadas con el envejecimiento, ya que el cristalino va perdiendo transparencia con el paso de los años. No obstante, existen cataratas que pueden estar relacionadas con medicamentos (como los corticoides), golpes, inflamaciones del ojo, miopía magna o diabetes.

Existe un tipo de catarata que aparece al nacer, llamada catarata congénita, que puede deberse a enfermedades hereditarias o a infecciones maternas durante el embarazo. Este tipo de catarata puede alterar el desarrollo normal de la visión en el niño si no se opera pronto.

¿QUÉ SÍNTOMAS PROVOCA UNA CATARATA?

Cuando se pierde la transparencia del cristalino la visión se vuelve borrosa progresivamente, con una evolución lenta y diferente en cada ojo. Es habitual que mientras progresan las cataratas necesiten cambios frecuentes en la graduación de las gafas. Incluso algunas cataratas mejoran la visión de cerca en personas que necesitaban gafas.

Además, pueden presentar visión doble en un ojo, dificultades para conducir de noche por el deslumbramiento ante luces intensas y los colores se ven desvanecidos. De todas formas los síntomas dependen del tamaño, la forma y el tiempo de evolución de la opacidad del cristalino.

¿CÓMO SE DIAGNOSTICA?

El oftalmólogo puede detectar una catarata tras realizar un examen a un paciente que refiera problemas de visión. Para ello se debe dilatar la pupila y llevar a cabo una adecuada exploración en la lámpara de hendidura. Es también importante comprobar que en el fondo de ojo no existe otra enfermedad.

De hecho, si además de la catarata existen otras lesiones (como cicatrices en la córnea o problemas en la retina o en el nervio del ojo), es probable que la visión mejore poco o nada después de operarse la catarata.

Dra.María Gomez
Dr.Roberto Gallego